domingo, 16 de octubre de 2011

17 minutos en el paraíso con… The Legend of Zelda: Skyward Sword

Tuvimos la oportunidad de probar The Legend of Zelda: Skyward Sword en la pasada EGS, y después de estar formados por horas y solo poder jugar unos pocos instantes los resultados fueron tremendamente satisfactorios.
Lo primero que jugamos fue divertida carrera sobre unas aves gigantescas llamadas Loftwings que les resultará bastante familiar para los que hayan jugado  Twilight Princess.
El control es básicamente como el mini juego de los avioncitos en Wii Sports Resort (dependiendo de la dirección corresponde al grado de inclinación que le damos al Wii Mote), solo que para aletear tienes  que agitar el control. El botón A nos sirve para acelerar por unos instantes, mientras que B es para frenar. El control funciona bien y visualmente no podríamos pedir más del Wii.

Después dimos paso a lo que más nos interesaba: la batalla. Enfrentamos a Lord Ghirahim (el malo). Al principio los controles resultan algo complicados, nada intuitivos, pero tras algunos minutos, se vuelven algo natural los movimientos.
El Wii Mote hace bien su trabajo, no es del todo excelente, pero a comparación de otros juegos, realmente los sobrepasa en calidad cuanto a registro de movimientos. El Nunchuk (el escudo)  resulta mucho más intuitivo y funcional que la espada y toma gran importancia dentro de las batallas, ya que los contraataques son indispensables para salir victorioso. Se nota desde un principio que ya no se va a tratar de dar espadazos a lo vil baboso, sino que realmente se necesitará de una estrategia, algo que realmente le da un giro interesante a la serie.

Ghirahim tiene varios trucos bajo la manga, entre ellos desaparecer, una gran espada y su increíble velocidad que más de una vez nos dejó  sin saber dónde iba a caer su ataque o donde iba a aparecer de nuevo, aunque como en toda pelea con un jefe, hay un momento en el que aprendes como o por donde atacarlo, pero de cualquier forma, quedamos verdaderamente satisfechos con el nivel de habilidad y estratégica que se requiere para jugar el nuevo Zelda. Al principio se sufre, pero al final resulta bastante satisfactorio.

Zelda: Skyward Sword nos dejó un buen sabor de boca, el manejo aéreo es natural y amigable; a la hora de pelear, tanto escudo como espada funcionan muy bien juntos y agregan mucho desafío a la hora de enfrentarse contra los villanos, mientras que a nivel gráfico realmente se nota que Nintendo explotó al máximo las capacidades del Wii.
Nintendo, tu muy bien n.n

No hay comentarios:

Publicar un comentario